GESTIÓN DE LA FORMACIÓN JUDICIAL (M)

Es un proceso misional mediante el cual se contribuye a través de la formación judicial, al fortalecimiento de las competencias requeridas para el ejercicio de la función judicial tanto en los magistrados (as), jueces y empleados (as) judiciales como en los jueces y juezas de paz y en las autoridades indígenas que administran justicia, mediante el desarrollo y seguimiento del plan de formación de la Rama Judicial de acuerdo con los recursos asignados; dando cumplimiento en el marco del Sistema de Gestión de Calidad, Medio Ambiente, Seguridad y Salud en el Trabajo.

En el Consejo Seccional de la Judicatura de Risaralda se llevan a cabo las siguientes actividades de apoyo para el proceso de Formación Judicial:

* Apoyo en la convocatoria y postulación de candidatos para las redes de formadores judiciales.
* Apoyo a las convocatorias y en la invitación a los formadores y formadoras
* Difunsión y divulgación a la convocatoria de los eventos planeados por la Escuela Judicial en las seccionales, la cual se encuentra publicada en el momento en los micrositios del Consejo y la Dirección Seccional, disponible de manera pública. 
* Mantenimiento y administración en el Registro Académico de las actividades de capacitación y formación, dictadas por la EJRL, que se desarrollan de manera presencial en las sedes judiciales de Risaralda

Para consultar este proceso en el SIGCMA, ingresar a:

https://www.ramajudicial.gov.co/web/sistema-integrado-gestion-de-la-calidad-y-el-medio-ambiente/gestion-de-la-formacion-judicial

Para ingresar al sitio web de la Escuela Judicial "Rodrigo Lara Bonilla", ingresar a:

https://escuelajudicial.ramajudicial.gov.co/

En el siguiente apartado, podrá encontrar los seguimientos trimestrales a los instrumentos SIGCMA, realizados con cada líder de proceso y su equipo de trabajo:

  • Plan de acción
  • Matriz de riesgos
  • Indicadores
  • Salidas no conformes

Estos seguimientos permiten a la Corporación monitorear el cumplimiento de las actividades planificadas, identificar y evaluar los riesgos potenciales, medir el rendimiento a través de indicadores clave y gestionar adecuadamente cualquier desviación o no conformidad. Este enfoque integral permite ajustar estrategias y mejorar continuamente los procesos para alcanzar los objetivos establecidos.

Plan de acción: (Ingresar)

Matriz de riesgos: (Ingresar)

Indicadores: (Ingresar)

Salidas no conformes: (Ingresar)